Mientras pongo en orden mis pensamientos y asimilo todo lo que pasó ayer en la Feria del Libro de Madrid (una manera muy fina de decir que hoy es domingo y la resaca me impide pensar en otra cosa que no sea una peliculita light o algún capítulo de House), os dejo con la última columna que ha aparecido en Fantasymundo en la que cometo la osadía de dar algún consejillo a la hora de escribir: El arte de pensar.
Mañana me explayaré más, mientras tanto, muchísimas gracias a todos, de corazón, por hacer del día de ayer uno de esos días inolvidables que siempre llevas en la memoria. ¡¡Cómo mola ir a
9 comentarios:
Muy buen artículo, David. Me gustó bastante.
Por cierto, le comenté a mi editor sobre el tercer volumen de Encrucijada y la remesa de Chile. Me dijo que había cierto retraso, pero que llegaría en breve.
Hola, David. Espero que podrás comprobar fácilmente quién soy. Te escribo para felicitarte por todas aquellas cosas que haces bien, que son muchas. Vi un booktrailer sobre tu última obra que me ha gustado mucho, pero aún no he tenido el gusto de leer ninguna de tus novelas, y no es porque no me apetezca.
Si no me equivoco, es la primera vez que cruzo algún mensaje contigo. Me han dicho que en alguna parte de tu blog has recibido ataques de alguien que se hace pasar por mí y por alguien de Mallorca Fantàstica, y vengo a desmentir ese punto.
A pesar de la polémica surgida entorno al tema de la hispacón, jamás le he perdido el respeto a nadie de tu entorno. Nos sentimos heridos durante aquel episodio en el grupo de discusión de la AEFCT, pero siempre interpreté que aquellas opiniones no representaban las de la mayoría, y aunque era mi sueño contar con una hispacón en el marco del festival que preparaba, dado el clima que se creó (del que no eludo que parte de la responsabilidad fue mía) preferimos desistir del empeño. Siempre he creído que fue más una cuestión de no saber discutir o negociar, que una cuestión de que fuera mala idea.
Por aquella época, cuando tenía tiempo, buceaba en este mundillo blogero vuestro y disfrutaba mucho, pero lo que no he hecho jamás, jamás, es escribir bajo pseudónimos.
Quien sea que te esté entrando al blog, no soy yo ni creo que sea nadie de mi asociación, si lo fuera me estaría haciendo a mí tanto daño como a ti, o más incluso.
Recibe un saludo auténtico desde Mallorca, y no nos juzguéis por los actos de cualquier papanatas que no tiene nada mejor que hacer que meter malos rollos donde no los hay. Nosotros aquí tenemos una forma muy distinta de divertirnos, y espero que un día puedas comprobarlo por ti mismo.
:-)
Hola Joana, bienvenida a este blog. Hubo un ataque personal bastante furibundo desde Mallorca, o al menos eso aludió el individuo de marras. Cargó contra muchos amigos del blog y contra mí personalmente, citando detalles personales que no venían a cuento. Incluso hubo alguna amenaza que otra.
Me alegro que salgas a defender el buen nombre de Mallorca y a desenredar un entuerto que no vale la pena ya ni mencionar. Lo cierto es que, como la mayoría de los trolls, utilizan el anonimato para atacar y desprestigiar, además de poner en la palestra entidades que no vienen a cuento. Por mí el asunto ya estaba más que olvidado y creo que con tu intervención se ha puesto el broche final a este asunto y es mejor no mencionar a trolls que buscan el protagonismo a través del caos y la mala sangre.
Gracias, David!
Creo tener una sospecha bien fundada de quién organizó el desaguisado en tu blog, y desde luego ni siquiera es de Mallorca. Si es quien yo creo, es bastante infantil y retorcido y también intentó crear mal ambiente en nuestros blogs. No contó que en nuestra pequeña comunidad nos conocemos casi todos personalmente y así es más fácil desenmascarar al impostor.
Y de nuevo felicidades. Aún no he podido disfrutar de tus libros, pero gracias al booktrailer sí que pude ver algunas ilustraciones, y tiene una pinta muy apetecible. Felicita también a quien te lo ilustró, es muy bueno.
Asunto arreglado, Joana. Es lo malo de internet, que el cobarde siempre se va a esconder detrás de un seudónimo en vez de dar la cara. Pero al final, la verdad siempre sale a la luz. Este mundo literario, aunque grande, es muy pequeño y todo acaba sabiéndose.
Hola, David:
He le�do con atenci�n tu columna sobre los mapas y las br�julas. Y me ha parecido muy interesante, pero yo, sin lugar a dudas, me posiciona a favor de la br�jula.
De hecho me siento incapaz de planificar demasiado lo que va a pasar en mis novelas. No puedo pensar en lo que va a acontecer, porque luego me pongo a escribirlo y los personajes se van por otro lado. Adem�s, si s� lo que va a pasar me aburro.
Para m� lo m�s f�cil es partir de una imagen, una sensaci�n, una frase... Luego la historia, si de verdad vale la pena, sale sola. Y fluye con suavidad. Lo m�s curioso es que al final la mayor�a de las piezas suelen encajar.
Yo no planifico c�mo van a ser mis personajes; de hecho a veces me sorprenden porque acaban tomando cuerpo y definiendose ellos mismos.
Hab�a pensado presentar a uno de los protagonistas de "Errores" como un tipo machista que enga�aba a su mujer, sin embargo, de repente, el tipo result� ser un encanto y estar perdidamente enamorado de su esposa. As� resulta mucho m�s cre�ble y aut�ntico, me encanta ese personaje. Pero yo no hubiera podido hacer nada al respecto, cuando me puse a escribir sali� as�.
Cuando empiezo a escribir nunca s� lo que va a pasar, ni c�mo va a acabar (si acaso, tengo alg�n breve flashazo de algunos hechos puntuales). Yo tengo que ser el primer sorprendido por lo que ocurra.
De verdad que admiro a los que como t� elaboran un completo y complejo mapa de lo que va suceder. Me parece mucho m�s complicado y creo que es m�s elaborado, pero yo soy incapaz de trabajar as�. Puede que sea demasiado vago.
Tambi�n opino que para escribir con br�jula hay que tener una gran intuici�n y que no todos son capaces de encontrar el �nimo suficiente para embarcarse en una dura traves�a sin saber cu�l ser� el destino.
As� que mi voto para la br�jula.
Desde luego cada escritor debe encontrar su método, y no por ello el mapa debe ser mejor que la brújula. El gran problema, como le pasó a mi amiga, llega cuando te pones a escribir por instinto y no sabes por dónde tirar. Eso significa que algo falla en el método. Para combatir ese vacío argumental, yo propongo un juego muy simple: detenerse y pensar. Pensar en tus personajes, en lo que quieres contar en la historia, en el argumento y en la meta de la novela. Si logras conjugar todos esos ingredientes, puedes vencer ese pequeño escollo y seguir adelante con la historia. Pero ojo, esto es sólo previsible en caso de que el método inicial falle.
Además, ¿a que no hay nada más excitante que pensar en tu propia creación?
Muchas gracias por las buenas nuevas,David. Aquí sigo esperando con paciencia la tercera parte de tu saga... de todos modos no tengo prisa, ya que el cuarto volumen aún no está escrito.
Aprovecho para felicitarte por la buena faena en Madrid, por lo que he leído, me parece que la pasaste muy bien.
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