No me gusta mucho adelantar la columna que suelo publicar mensualmente en Scifiworld, pero creo que en esta ocasión, el contenido de la misma es tan importante, que voy a hacer una excepción. Debemos sensibilizarnos ante una situación que está a punto de arrollarnos y que determinará el futuro de la literatura. El libro electrónico se encuentra a la vuelta de la esquina y su irrupción va a provocar una serie de decisiones drásticas que van a determinar el futuro del mercado. Antes de ayer, hablando con mi buen amigo Luís, editor de Scifiworld, me comentaba que El Corte Inglés ya está a punto de comercializar a gran escala y a un precio económico su propio lector digital. Y siempre que El Corte Inglés pone en marcha la maquinaria, es inevitable que otros grandes almacenes se sumen a la fiebre consumista con sus propios modelos.
A parte de la inevitable revolución propiciada por la aparición del nuevo hardware, las grandes librerías se preparan para el cambio de mercado que propiciará la venta del formato electrónico. Sin ir más lejos, hace un par de meses, cenaba con un veterano empleado de una de las librerías con más solera de Valencia y me dejaba bien claro que sus jefas estaban verdaderamente acojonadas ante la llegada de lo inevitable. Muchos libreros saben que están viviendo los últimos años de bonanza y que se enfrentan a una extinción inevitable y paulatina. Grandes superficies como Abacus, hablan de reordenación de secciones o incluso están empezando a editar sus primeros libros. Lo cierto es que, en menos de diez años, el libro se convertirá en un objeto de culto y las librerías en locales curiosos donde encontrar una remesa de títulos incunables.
¿Y a qué nos aboca la inminente llegada del libro electrónico? A elegir un precio adecuado para el nuevo formato. ¿Y cuál va a ser ese precio? Dios me libre de la responsabilidad de seleccionarlo. Pero tengan en cuenta una cosa: aquellos que, en los próximos años, tienen la obligación de catalogar económicamente sus obras, están contrayendo un grado de responsabilidad máxima. Y lejos de pensar en sus propios intereses económicos, su deber moral es preocuparse por la implantación lógica de un precio que se adecue a las exigencias de mercado y que salve al nuevo formato de las redes piratas que asolan Internet.
Por lo tanto, el grado de responsabilidad es máximo. Y ya saben cuál es el pensamiento del españolito de a pie: ¿si puedo obtener algo gratis, por qué tengo que pagarlo?
Contra ese tipo de pensamiento es el que tiene que luchar el editor. Su responsabilidad moral es la de encontrar un precio lógico que haga frente a la piratería y no hunda el mercado del libro de igual modo que se hundió el mercado de dvd’s o el de la industria musical.
Así que ya saben, señores editores, en sus manos está la responsabilidad. Dejen a un lado sus necesidades personales, la economía inmediata, la necesidad de llenarse el bolsillo por el camino fácil y comiencen a devanarse la sesera, porque en sus manos está el futuro de la industria. El mundo del libro está a punto de cambiar, y sus decisiones determinarán que sea para bien o para mal.
A parte de la inevitable revolución propiciada por la aparición del nuevo hardware, las grandes librerías se preparan para el cambio de mercado que propiciará la venta del formato electrónico. Sin ir más lejos, hace un par de meses, cenaba con un veterano empleado de una de las librerías con más solera de Valencia y me dejaba bien claro que sus jefas estaban verdaderamente acojonadas ante la llegada de lo inevitable. Muchos libreros saben que están viviendo los últimos años de bonanza y que se enfrentan a una extinción inevitable y paulatina. Grandes superficies como Abacus, hablan de reordenación de secciones o incluso están empezando a editar sus primeros libros. Lo cierto es que, en menos de diez años, el libro se convertirá en un objeto de culto y las librerías en locales curiosos donde encontrar una remesa de títulos incunables.
¿Y a qué nos aboca la inminente llegada del libro electrónico? A elegir un precio adecuado para el nuevo formato. ¿Y cuál va a ser ese precio? Dios me libre de la responsabilidad de seleccionarlo. Pero tengan en cuenta una cosa: aquellos que, en los próximos años, tienen la obligación de catalogar económicamente sus obras, están contrayendo un grado de responsabilidad máxima. Y lejos de pensar en sus propios intereses económicos, su deber moral es preocuparse por la implantación lógica de un precio que se adecue a las exigencias de mercado y que salve al nuevo formato de las redes piratas que asolan Internet.
Por lo tanto, el grado de responsabilidad es máximo. Y ya saben cuál es el pensamiento del españolito de a pie: ¿si puedo obtener algo gratis, por qué tengo que pagarlo?
Contra ese tipo de pensamiento es el que tiene que luchar el editor. Su responsabilidad moral es la de encontrar un precio lógico que haga frente a la piratería y no hunda el mercado del libro de igual modo que se hundió el mercado de dvd’s o el de la industria musical.
Así que ya saben, señores editores, en sus manos está la responsabilidad. Dejen a un lado sus necesidades personales, la economía inmediata, la necesidad de llenarse el bolsillo por el camino fácil y comiencen a devanarse la sesera, porque en sus manos está el futuro de la industria. El mundo del libro está a punto de cambiar, y sus decisiones determinarán que sea para bien o para mal.
29 comentarios:
Personalmente no voy a leer ningún libro en pantalla, porque me niego a enchufarme a otro maquinita (al igual que me niego a comprarme un i-pod - además de que estoy a punto de mandar a la mierda el movil o por lo menos meterlo en un cajón). Que con los años me llamen coleccionista, sería un honor. Creo que tendrán que convivir ambos formatos, porque estoy seguro de que no soy el único que piensa así. Así que espero todavia haya un mercado para el libro de papel.
Difícil lo veo. Yo también creo que el cambio de formato es inminente. Llegará, nos llevará por delante a todos y no dejará espacio para la nostalgia.
El formato electrónico tiene sus ventajas. Es cómodo de leer, nada que ver con la minúscula pantallita de un ipood. Y encima es agradable a la vista y no cansa. Además, lo bueno de un lector electrónico es que economiza el espacio. Yo también estoy preocupado por el precio que tendrán los libros electrónicos. Si el coste se dispara, propiciará que aumente el pirateo. Ya se andarán con cuidado las editoriales, por la cuenta que les trae.
Todo son apuestas. Nadie sabe lo que va a pasar.
Lo que ya está pasando es que se editan muchos más libros de los que se venden, y eso es insostenible.
Yo imagino que habrá un duro reajuste, en los próximos años será más difícil publicar y vender, y las librerías sobrevivirán tirando exclusivamente de best sellers hasta que vuelvan las vacas gordas.
Si es por apostar, yo apuesto a que el libro de papel no desaparecerá nunca.
El reajuste ya se está haciendo, Ismael. Es más, cada vez existen diferencias más abultadas entre los distintos títulos que aparecen en el mercado. Las tiradas de las grandes editoriales cada vez son más numerosas y las tiradas de las pequeñas editoriales cada vez se reducen más. El mercado se está fragmentando y la separación entre ambos segmentos cada vez va a ser más significativa.
Yo no creo que el papel desaparezca completamente, pero el libro sí que se va a convertir en un objeto de culto y la gran mayoría de títulos aparecerán en formato electrónico y una mínima parte en papel.
Es más, las editoriales empezarán inculcando el régimen electrónico en nuestros hijos; no en nosotros, pobres carrozas que jamás abandonaremos el papel por iniciativa propia. Serán nuestros hijos los que acudan a clase sin mochila y con una tableta y un pendrive donde llevarán todos los libros que antes pesaban una morterá. Y ellos mismos serán los que introduzcan en los hogares el libro electrónico, porque aprenderán a leer en lectores digitales y lo trasladarán a sus momentos de ocio. Eso conllevará que poco a poco el panorama vaya cambiando y se vuelva más sofisticado.
No creo que el libro desaparezca.
Sabemos que la piratería ha hecho mucho daño al mercado del dvd pero esto pasa con toso. También se "piratea" con el tema de libros. Hay muchos titullos que se pueden descargar gratuitamente pero no podemos comparar el libro con el cd.
Muchos de nosotros compramos libros porque nos gusta tenerlos físicamente, tocar sus páginas, leerlos en la cama... no se disfruta una lectura de la misma manera si la tienes entre tus manos, en papel, a tenerla tras una pantalla.
Hace poco leí un artículo en una revista en el que varios profesionales hablaban sobre el futuro del libro. Todos coincidían en que cambiaría el sector pero ni mucho menos que se impondría al libro.
Tal vez para el escritor novel sea un paso adelante. Electrónicamente será más barato de publicar y puede que de esta manera pueda dar a conocer su obra.
Primera pregunta:
Y si los libros en pdf no han funcionado, que os hace pensar que ahora sí funcionarán?
Segunda
Cuanto tiempo tardará X en sacar al mercado su pantallita multilectora de multiformato?
Internet es un fraude consentido por Telefónica y las grandes compañías, que hacen su agosto facilitando el acceso gratuito del consumidor a bienes de pago, en detrimento de autores y editores. La Unica solución es aplicar una tasa al ADSL y a repartir escrupulosa y religiosamente a tantas gallinas entran tantas salen (nada de SGAE ni chiringuitos). Una vez montado el sistema, que alguien esté tan venado para leer libros no papel, allá él, mientras pague... Yo por mi parte no renuncio al papel... Sirve pa todo... Pa trancar muebles, pa encender chisqueretas, pa rallarlo y pa limpiarse el...
No hay nada igual...
De todos modos en España, como siempre, se acabará haciendo una chapuza.
Me gusta el libro en papel, y hoy por hoy no me veo leyendo con una pantalla en las manos. Pero también recuerdo que decía allá por los 90 y pico que no llevaría móvil y hoy si te quedas sin batería te da un yuyu.
Si el formato es bueno acabará imponiéndose por mayoría, y los libros de papel quedarán como los vinilos...
Y respecto al precio ¿qué precio se le va a poner cuando habrá redes de "intercambio" que te lo facilitarán gratis? ¿0,01€?
Al primero que le interesa seguir protegiendo la situación actual es a Telefónica y, por supuesto, a Zapatero. Si en España se tomaran medidas como las que se están tomando en Francia (¡¡y ya veremos si prosperan!!), la oposición machacaría al gobierno con alegatos del tipo: España se convierte en uno de los países con menor tasa de conexiones de ADSL. ¡Somos unos incultos!
No importa que el índice de piratería en nuestro país se compare a los de Pakistán o Tailandia. Lo que verdaderamente importa es que España es una primera potencia en esto de los adsls.
Queridos amigos y blogueros varios, siempre tendemos a conservar lo que tenemos. La innovación trae polémica, discusión y aventura, ppero de todo ello saldrá el camino a desbrozar. ¿obstáculos? muchos y diversos, pero esas son las piedras del progreso.
¿Que le díría el Abad de Monserrats a Güttemberg cuando le presentó el modelito de imprenta y le dijo que redujera costes de copiateo? Pues que era un invento del demonio, ¡que dónde va a parar un libro manuscrito en letra gótica e ilustrado preciosamente!
¡Atenta la compañía, que en pocas semanas habrá novedades!
Yo lo que creo que está fallando es el posicionamiento de los autores. Sí, los escritores, esos que dicen ser los últimos monos de la industria y que me recuerdan al león del mago de Oz. Ya vale de lamentarse por los abusos de los editores y distribuidores, que eso del romanticismo pasó a mejor época. En primer lugar faltan asociaciones fuertes de escritores (excepto la SGAE). En segundo lugar falta un posicionamiento claro. ¿Queréis vuestras obras en formato digital o no? Sí vosotros queréis vender en digital pues ya está todo dicho, hacia allí irá el mercado. Si no queréis vender en digital pues a joderse los de la pantallita. Escritores, vosotros tenéis la clave, pero tenéis que estar unidos.
Uwe, en todo el proceso editorial hay alguien que está muy por encima de los editores, distribuidores y escritores, y es el lector, que a fin de cuentas es el que suelta las perras por el producto. Él, con su dinero, decidirá qué sistema se implantará en el futuro.
Yo (y hablo como consumidor que compra muchísimos libros y tiene serios problemas de logística en casa) no creo que la digitalización sea mala. Siempre y cuando no suponga un trastorno en el ejercicio de la lectura. Me da igual que exista una pantalla o un mamotreto de papeles... siempre y cuando me sienta cómodo al leer y mis ojos no sufran.
Si encima, se produce un abaratamiento de costes (¡¡hay libros en rústica que ya valen casi 24 euros y libros de bolsillo que se venden a 10!!) bienvenido sea.
El escritor español es, precisamente, el eslabón más débil de la cadena y, por tanto, el que menos presión puede ejercer. El mercado nacional se sostiene, precisamente, en autores anglosajones y americanos. Ellos son los que mandan. Nosotros sólo podemos opinar, pero siempre seremos voces sin mucha relevancia en las tomas de decisiones.
Sois vosotros (nosotros) los lectores los que, al final, tendremos la última palabra.
Yo estoy encantado con mi ebook y, como autor, no me importaría nada de nada publicar sólo en este formato (siempre que tenga una buena audiencia, porque hacerlo para cuatro gatos que somos ahora lo veo un poco ridículo). Como adelanto, ya voy colgando relatos míos en internet maquetados para lectores de 6'' y no descarto en un futuro hacer lo mismo con obras inéditas que, por su extensión, son impublicables.
Eso sí, regularmente me hago un librito recopilatorio en lulu exclusivamente para mí, porque me gusta verlo en la estantería :)
Y es que en el fondo todos somos unos románticos...
Ehi, pues cuando haces esos recopilatorios en Lulú podrías avisar a tu selecto club de amigos. Que yo me compraría muy agusto esos ejemplares inéditos.
Por cierto, gracias al señor Soto yo descubrí la maravilla de la lectura electrónica. En sus manos vi el primer lector.
Creo que es mejor que no leáis nunca el contenido de la mayoría de esos libritos, jejeje... Son relatos inacabados, cosas de cuando tenía trece años y en general nada que nadie en su sano juicio querría leer, habiendo tantos libros buenos en los que invertir el tiempo :D
Yo también estaría dispuesto a pagar por una copia electrónica. Tengo un lector de archivos y no me va nada mal. Pero nunca pagaría por una copia digital el precio equivalente a un libro en papel.
Hola, yo voy un poco por donde decía Sim, ¿y si el libro electrónico no triunfa? Ya hemos tenido ejemplos de diferentes formatos como el Laser Disc o el Mini Disc que en España no funcionaron y en otros países son muy comunes.
Y segundo, si el formato electrónico se implanta, como así parece que será, aunque conviviendo con el papel, ¿qué pasará con las poderosas distribuidoras?
Un saludo.
Dícese de la Compañía Británica de las Indias Orientales que cuando comenzó a ejercer su dominio por los mares, rebanó las gargantas de muchos piratas que se dedicaban a robar a la gente de bien.
A ver si la historia se repite y muchos de esos piratas que hoy campan por los océanos literarios se ven privados de sus poderosos galeones ante la irrupción de un medio que unirá más que nunca al editor y al lector. Mintras tanto, las distribuidoras seguirán siendo ese mal inevitable que seguirá dedicándose al pillaje de las editoriales más modestas.
Alex dijo:
"si el formato electrónico se implanta, como así parece que será, aunque conviviendo con el papel, ¿qué pasará con las poderosas distribuidoras?
Habría más bien que decir: ¿qué pasará con las editoriales? La agencia de Carmen Balcells va a distribuir directamente los libros en formato electrónico de sus representados, y en los contratos de edición se deja fuera los derechos digitales. Si el libro electrónico triunfa, (cosa que dudo mucho), toda la industria cambiará: editoriales, distribuidores, libreros.
Que vivas tiempos interesantes, dice la maldición china.
Yo toco madera :-)
Yo tampoco creo que el libro-objeto desaparezca. Seguirá siendo un preciosos objeto ideal para regalar estampando de tu puño y letra una dedicatoria.
Pero que el ebook será el modo de lectura más extendido en 10 años, no lo dudo. Y el precio bajará para aprovecharse de la compra por impulso. Si por 1 eurito tengo una novelita corta... ¿quién se va a molestar en buscarla por Internet? El mercado que mueven las compras por impulso en el móvil es mpresionante. Sobre todo es impresionante porque nada de lo que uno se descarga con el móvil require ser pagado: lo puedes encontrar gratis en la red. Pero casi nadie lo busca en la red.
Si los editores se dan cuenta de esto, quizá salvemos el futuro del libro. Si siguen pensando en 1 libro = 20 euros, se repetirá la historia de la música. Con el agravante de que en la música sólo han "perdido" las discograficas. ¿Perdido? ¿Alguna ha cerrado? Siguen ganando dinero gracias que controlan tooda la cadena de difusión: bolos, politonos y demás. Pero con el libro perderán sobre todo los novelistas, incapaces de hacer bolos y aporvechar la fama conseguida por la difusión pirata de su obra.
(Natu en Sedice)
Hombre, Natu, bienvenido a casa!!
Hola Nuxlum, pero lo que no se sabe es que la Carmen ha vendido los derechos de los originales, entregándolos en formato word SIN CORREGIR, lo que está obligando a un costo añadido a las plataformas de comercialización.
Yo creo que si se respeta al lector no debería haber diferencia en la maquetación del papel y el electrónico.
Hola, Jorge.
En el momento que la venta de libros electrónicos sea rentable, las agencias que aún no los tengan, contratarán correctores de estilo para pulir los textos, al igual que ya contratan a colaboradores externos para que les hagan informes de lectura. Por ejemplo, Juanma Santiago, en su blog, admite que ha hecho varios informes para algún conocido agente.
Aunque sea una obviedad, ninguno podemos adivinar que es lo que va a ocurrir. No olvidemos que, al menos en lo que a literatura de genero se refiere, es la pura aficción, el amor por los libros de un lado, y la vocación y el genio escritor de otro, lo que sostiene el negocio de las editoriales. No tengo ninguna duda de que la edición digital, en aquello que sea de orden práctioc, ( por ejemplo en literatura jurídica, o en modelos y formularios de la administración, o, en los libros del " cole"), ninguna duda del triunfo absoluto del libro electrónico. Es, sencillamente, cuestión de tiempo. Y lo creo así, porque es lo más barato y porque es una tecnología nueva que está ahí y que no vamos a poder evitar la tentación de utilizar. Pero, en la literatura de género, basada en " la vocación lectora" de unos pocos " lectores compulsivos"? Seguirá teniendo negocio la industria editorial en base a nuestra aficción? Aparecerá la edición a la carta y subjetiva sobre un acervo amplísimo de libros digitales?. No lo sabemos. Nos toca ser pacientes y barajar. Eso sí, lo que no va a desaparecer ni con esta ni con ninguna otra tecnología es el genio detrás de un texto. La Personalidad, la creatividad y la imaginación. Sin ellas, todo quedará en papel electrónico " mojado".
Fíjate en una cosa muy importante que has dicho: por ejemplo en literatura jurídica, o en modelos y formularios de la administración, o, en los libros del " cole".
Si los chavales se acostumbran a leer en el cole con un lector digital, ¿cuál será el futuro de nuestra sociedad? Las tendencias no las marca el animal de costumbres, sino el heredero de ese animal, al que se le introducen nuevas costumbres.
Si nuestros hijos crecen leyendo en una pantalla, seguirán haciéndolo toda su vida e inculcarán ese método a sus hijos. Ellos son el futuro. No nosotros.
Yo no tengo problema en leer libros en un lector tipo papyre, que no me deshaga los ojos. Lo utilizo a diario, aunque aún les queda que avanzar en el tema de formatos, etc... No obstante, el indice de lectura en españa es bajo, por lo que exceptuando a los "compulsivos" que leemos lo que nos echen, el libro electrónico implica un uso habitual. Uno que lea de higo a brevas no va a comerse la cabeza con un ebook pudiendo comprar un libro en papel para el bestseller de turno.
En cuanto al tema de autores, las librerias son el filtro donde se dan a conocer los escritores. esa guerra se trasladará a internet. El precio lógicamente bajará (bueno, espero) al eliminar intermediarios, pero habría que ver qué le reporta a un autor conocido y que venda el tema electrónico. En cuanto al desconocido y al novel, pues lo va a tener crudo para hacerse un hueco en la cacofonía de nombres y títulos.
En fin, que va a estar el tema movidito.
Mazarbul
siento que se me haya duplicado el comentario, que no me aclaro con las identidades.
mazarbul
Estoy de acuerdo con David.
Son nuestros hijos los que cambiaran el gusto por la lectura en el libro electronico. El modelo esta condenado desde hace tiempo y ahora es la tecnologia la que permite la lectura sin agotar los ojos, no se de nadie que tenga un libro electronico y lo maldiga.
A mi edad seguiré comprando libros en papel porque el fetichismo y una biblioteca de 1000 ejemplares no se la puede hacer competir cun un ebook en una estanteria y 3 targetas de memoria con 5000 libros. Mis libros tienen una dignididad y seguro que se quemarian antes que permitirlo. Y yo soy deboto de mi biblioteca verlos de golpe no tiene precio.
Con lo que no estoy de acuerdo David es que esto pueda salvarse de la pirateria por muy barato que se ponga...
Haciendo una busqueda por la mula he conseguido 50.000 libros en formato pdf sin pestañear disponibles.
Solo veo dos opciones a cada cual mas dolorosa para salvar el negocio. Cambiar el negocio...
Orientarse a una estrategia de compra compulsiva tipo politono, con precios despreciables para el comprador y rezar para que por un 1 euro puntual la gente no levante la mula, esto para los lectores de bestseller...
Segundo punto añadir valor al libro comprado que no puedas obtener por la mula... Permitiendo que el comprador del libro pueda acceder a foros especiales con el autor, fondos de escritorio, acceso a resumenes, libros anotados, referencia, entreviestas del autor, criticas, versiones dedicar por el autor, ediciones en papel de superlujo exclusivas y numeradas como premios etc. Dotar a la compra del libro( Con un precio menor, esto es inevitable) de todo un dominio de elementos que permitan al comprador obtener una satisfacción por gastarse 4 o 5 euros que la mula no permita adquirir. Un libro electronico no puede valer más que eso... cualquier precio superior esta condenado a su muerte.- Esto por si solo es cambiar todo el paradigma de edición, distribución centrando, el libro en los dos extremos, escritor y lector y todos los elementos adjuntos pero eliminado del circuito en la medida de lo posible los distribuidores. Las editoriales no tendran que vender libros... tendran que vender autores, contenidos afines, tendran que organizar actos solo para compradores, acceso a premiers de la versión del guión o del prmier trailer de su versión en cine, etc.
Los autores deben crear marca una red social de lectores que les permita vincularse de una forma superior al proceso unidireccional que existia hasta ahora entre autor y lector.. Esto no es soportable salvo para escritores de masas. El resto el que quiera sobrevivir con 3000 ejemplares deberá crear todo un proceso de feedback con el lector que permita la compra del libro a cambio de un elemento de valor superior al conjunto de palabras que forman el libro.
Hay que crear red de lectores y estar proximos a ellos si se quiere sobrevivir. El negocio ya no es el mismo. Las editoriales deben evolucionar hacia esta dirección acompañar al lector uno a uno convertirse en relaciones públicas más que en mercaderes de libros.
No hay más.
Otro abrazo.
Hace un tiempo, desde algun blog, se puso en duda que El corte inglés pudiera comercializar su propio lector de libros digitales. Pues aquí lo tienen:
http://www.elcorteingles.es/informatica/producto/producto.asp?referencia=28555700021
Ahora sólo es cuestión que baje.
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