lunes, mayo 11

Abrams y su Star Trek 2009

Esta es la semana Abrams, sin lugar a dudas. Con su Star Trek 2009 recientito recientito en la gran pantalla y con la quinta temporada de Perdidos a punto de explotar en una finale emocionantísima, Abrams se consolida como una de las figuras más importantes de la industria cinematográfica actual.
Pero dejemos Lost para el viernes, aunque será inevitable mencionarlo a lo largo de este comentario, y centrémonos en Star Trek. Vaya por delante una confesión: no soy trekie, así que todo eso del espíritu original y las raíces del universo Star Trek me lo paso por el arco del triunfo y me quedo con la síntesis de la película. Aunque sí que es cierto que he visto Star Trek TOS, TNG, DS9, Enterprise y todas las pelis anteriores, así que criterios de valoración tampoco me faltan. El gran problema que he tenido yo siempre con Star Trek es que existía Star Wars, así de simple. Mientras los jedis eran trepidantes y te lo pasabas pipa viendo como salvaban la galaxia, la tripulación del USS Enterprise se pasaba los capítulos discutiendo sobre conceptos que para mí, entonces un crío, sonaban demasiado complejos. Creo que comencé a enamorarme de Star Trek gracias a los borgs y a ‘Primer Contacto’. Después llegó ‘Insurrección’ y me entró nuevamente la depre. Por suerte, ‘Némesis’ arregló las cosas y disfrutamos del imperio romulano en su máximo esplendor.
‘Enterprise’, la última serie de televisión, partía de una premisa interesante: los tripulantes de la primera nave espacial que se dedicaba a explorar el espacio exterior. El problema es que rápidamente la serie se enrolló en esa guerra interminable contra los Xindi y al final degeneró en una serie de capítulos que apenas llevaban a ningún sitio.
‘Enterprise’ duró un telediario y el capitán Archer y toda su tripulación se convirtieron en el testamento de una franquicia que parecía agotada.
Pero ahí estaba el tito Abrams para solucionar las cosas.
Star Wars había funcionado durante medio siglo, pero tras el fiasco de la última trilogía, la saga comenzaba a dar tumbos hacia ninguna parte. En el universo cinematográfico galáctico había un hueco que rellenar y Abrams, que de tonto no tiene un pelo, se situó a los mandos del Enterprise, puso al máximo el motor de curvatura y se lanzó a lo imposible: revitalizar Star Trek; y para ello se olvidó del capitán Picard, de la estación DS9 (aunque siempre he pensado que este es uno de los mejores spin off que se han hecho) y de la voyager, y se centró en lo que a todo el mundo le gusta, el capitán Kirk y Spock.


El gran problema era que los actores de la serie de los años 60 ya estaban en el geriátrico y rescatarlos para protagonizar una película a lo Star Wars no acababa de cuadrar. Y el otro gran problema era que si los rejuvenecía, nos encontrábamos con una nueva franquicia que no podía ir a ningún sitio, pues todo treki se sabe al dedillo las andanzas de la primera Enterprise. Así que… ¿cómo solucionamos este problema?


¡¡Empezamos con los spoilers!!
Si en Lost, Faraday decía aquello de: «Whatever happened, happened», es decir, «lo que pasó, pasó» y las paradojas temporales no existen (al menos eso creía hasta que su mamá le pegó un tiro en el pecho en uno de los últimos capítulos), en el universo Trekie de Abrams las paradojas sí existen, y con la llegada del viejo Spock al pasado, se produce una de las mayores paradojas temporales en el universo de los nuevos cadetes de la Enterprise y nos encontramos con una línea temporal diferente a la que ya hemos vivido en la serie. Así que el señor Abrams, con un simple detalle, ha dejado vía libre a todos los guionistas que quieran hacerse cargo de la serie.
Ya se ha dicho hasta lo indecible que la nueva Star Trek tiene más de Star Wars que de Star Trek, aunque la federación espacial sigue estando, vemos reflejados en los nuevos actores el espíritu de los originales (sí, aunque parezca mentira, Bones sigue diciendo: ‘Por el amor de Dios, Jim…’ y otras horteradas parecidas) y siguen apareciendo pequeños toques de ciencia ficción hard que dejan ese regustillo original. Pero en esencia, Star Trek 2009 esta hecha para agradar a un nuevo público y que el novio carrozón se lleve a la novia que no entiende ni papa de ciencia ficción y le vaya contando la idiosincrasia de los personajes conforme va transcurriendo la peli.
Personalmente me han gustado todos los protas, desde el nuevo y osado capitán de la Enterprise hasta un Sylar que mantiene el rostro incorruptus de Héroes y se convierte en un clon de Spock difícil de igualar.


Al doctor McCoy se le echa de menos, pero Karl Urban lo clava tan bien que da lo mismo que intervenga poco. Bones está en la película y cuando aparece ves claramente que es él y que forma parte de la nave. Chekov se sale y Sulu cumple perfectamente. Ujura, tras la debacle de Vulcano y la creación de la paradoja temporal, deja salir sus sentimientos y depara un romance que en la serie original no existe. Y me dejo para el final al mejor de todos, al actor que en cuanto sale te dibuja una sonrisa en los labios y cada vez que interviene te das cuenta de que es el puto amo: Simon Pegg recrea un nuevo Scotty disparatado y genial que culmina de manera eficaz la tripulación del USS Enterprise.


La aparición de Leonard Nimoy no es un mero cameo. ¡¡Ni mucho menos!! El Spock original es parte importante de la trama y aparece una y otra vez en los momentos más dramáticos. Es un secundario necesario para ver la evolución de ese Spock torturado y oscuro que es Zachary Quinto. Eric Bana cumple en su papel de ‘malo’ y por ahí también asoman una Winona Ryder irreconocible y una doctora Cámeron que hace de mamá de Kirk.
¿Y qué tal la protagonista de la historia? ¿Aparece esa Enterprise de ensueño que nos ha fascinado una y otra vez en las distintas películas? Pues sí. Desde que vemos la nave insignia de la flota estelar en los astilleros de Iowa, hasta que McCoy y Kirk la contemplan desde la lanzadera espacial, nos damos cuenta de que los chicos Light & Magic se lo han currado muchísimo y han creado un crucero espectacular que deslumbra cada vez que cruza la pantalla.


Por fin se reinventa una de las mayores franquicias de ciencia ficción de todos los tiempos y parece que esta vez sí vamos a tener Star Trek para rato, con un grupo de tripulantes muy cercanos a los de la serie original y con los que todos podemos identificarnos. Volvemos a explorar el espacio, la última frontera, ojalá esta vez sí lleguemos a esos lugares donde nadie ha podido llegar.

By David Mateo with 11 comments

11 comentarios:

Cien por cien contigo. Muy buena la resurrección trekie. Y ahora parece que tendremos capitán Kirk para rato. Larga vida a la federación.

Lamento diferir de vuestra opinión. A mi me parece una película sobrevalorada y que apenas cuenta nada. Es un episodio más largo de Enterprise, muy malo y que parece protagonizado por uno de los chicos de Melrose Place. No hay futuro para Star Trek.

y no nos olvidemos de Fringe, que también acaba esta semana.

Bueno, yo te digo una cosa David. Nunca he sido muy amante de la sci fi. De hecho, aunque me gustan las antiguas de Star Wars, tampoco me volvían loco, y ni mucho menos las antiguas series de Star Trek (recuerdo haber visto alguna peli con Charles Xavie...digo con Picard) y poco más.

Pero esta nueva peli me ha encantado y mucho. No se, quizás después de los fiascos de las nuevas de Star Wars (que malas...) esta nueva me ha encantado.

Y por cierto, creo que el Kirk de esta peli, hubiera molado mucho como Anakyn Skywalker, no el paquete que eligieron.

Saludos

A mí es que Fringe no me ha calado. Aunque sí que es cierto que le voy a seguir dando más oportunidades porque el trasfondo me gusta. Expediente X es una de mis series preferidas. Pero eso de que en cada capítulo de Fringe para resolver un misterio se saquen de la manga una máquina aún más inverosímil que el misterio que se llevan entre manos, me parece un poco deux machine y le quita mucho encanto a la serie.

A mí Kirk sí que me mola. Creo que le he leído a Rafa Marín que es un poco Indiana Jones, bocazas y que recibe más que da. Totalmente de acuerdo.
El Hayden Chirstensen, en cambio, sí que me parece un pelín sosainas.

El Anakin perfecto habría sido Sam Winchester, a.k.a. el hermano bueno de Sobrenatural... ya no tan bueno :)

RM

¿Sam Winchester se pasa al lado oscuro en la nueva temporada? :((:((
Que disgustazo se va a llevar el pobre John después de haberlo criado en las mejores universidades.

Hola. No se si los actores tan jovenes cuadran bien en la pelicula. A mi a veces me parecian un poco fuera de lugar. Me gustó mucho Chekov y aunque la historia de amor entre Spok y Uhura no estuviera en la serie, tambien me gusto mucho.

El tío que diseñó esa nave a principios de los 60, y casi sin presupuesto, le tendrían que hacer un monumento.
Cuando la veía de nano, en blanco y negro me quedaba alucinado. Pero pasan los años y sigue siendo una nave preciosa.

Pues espera a verla en movimiento. Creo que Star Trek 1 comenzaba con una perspectiva desde la lanzadera, pues en esta nueva hay un nuevo paseo alrededor de la Enterprise que resulta alucinante cuando se entremezcla con la música.

Todo un peliculón. Disfruté como un enano en el cine. Me fui solo, triste pero cierto, y una vez que se apagaron las luces me importó un colín. Me lo pasé de fábula, que es lo que me gusta cuando voy al cine y que pocas veces consigo como me ocurrió con esta peli. Genial detron del universo de Star Trek y fantástica como cinta independiente.

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