jueves, febrero 14

Voy a reflexionar conmigo mismo

Quiero ser Stephen King, pero no en lo monetario, que también, sino en la placidez. No sé donde escuché, o leí, que su vida laboral comienza tempranito por la mañana. Se levanta a eso de las ocho, se pone delante del ordenador, escribe y a las doce, cuando comienza a hacer calorcito, apaga la máquina y se baja a la calle a hacer las compras, a dar un paseo y el resto del día lo dedica a tocarse la mandolina. Algo parecido le escuché a Juan Manuel de Prada. Otro de los que enciende el PC a las ocho de la mañana, lo apaga a las doce del mediodía y pasa la tarde enfrascado en una tarea —y ojo, uso palabras más o menos textuales— “importantísima para el escritor”: reflexionar consigo mismo.

Famoso escritor en plena reflexión existencial...

Pues bien, algo le debe pasar a mi otro yo, porque el muy cabrón no encuentra tiempo para reflexionar conmigo. Las últimas semanas son de infarto: mi pobre novela de terror no deja de subir, pero a un ritmo que a mi me produce insatisfacción personal, tengo que preparar relatos para tres antologías, estamos enfrascados en un proyecto secreto que más de un aficionado a la fantasía mataría por saber, afrontar la huelga general de ilustradores que parece estar desatándose por toda España (señores ilustradores, si son buenos y manejan como Dios el photoshop, mándenme un email porque tengo a un pobre editor desquiciado), atender a David Jasso que viene para el taller de Moncofa (vaya categoría esta cogiendo mi taller: Laura Gallego, Santiago García Clairac, Juanmi Aguilera, Julián Díez, Francisco Illán, Javier Negrete, Jose Miguel Vilar, Pep Castellano, Pedro Camacho… ¿alguien da más por menos?), ayudar al pobre Claudio a preparar el taller de Yecla, preparar una campaña publicitaria para un nuevo producto que va a salir al mercado, pelearme con Rafa Alonso para sacar las tiras de Tajundra, mantener el blog al día, ayudar a los niños de Moncofa a montar un programa de radio que debe de emitirse en marzo, la presentación de Andrés Díaz para el sábado en la Fnac (que por cierto, los de Equipo Sirius ni me han mandado el libro, ya les vale), responder medio centenar de emails, mantener al día las portadas de Sedice y de Scifiworld y que no se resientan los contenidos, coordinar los cuentos de Historias Asombrosas y convencer a Luis de que la portada para el número tres de la revista es una joyita que no podemos dejar pasar (¡¡eh, Luís, que no podemos dejar pasar!!) y, por si todo esto fuera poco, preparar un par de convenciones y afrontar la inminente publicación de un par de libros. Arrrfff… arrffff… cansa hasta de leerlo, ¿verdad? Pues bien, si queréis ser escritores, ya sabéis, todo esto una miiiiiiierda comparado a lo que tendréis que afrontar el día de mañana. Si es que a la más mínima oportunidad de curro no puedes decir que no, sea más o menos remunerado. Tienes que estar en el plato y en las tajadas.

Vamos que son las siete y media y ya llevo una hora dándole a la tecla y todavía sin poder meterme en el libro. Así que, como me queda por delante un día de órdago y quiero que me cunda, dejo de hacerme pajas mentales en el blog y abro el documento del libro para seguir escribiendo.


¡¡Feliz día de los enamorados!!


By David Mateo with 6 comments

6 comentarios:

Esa foto...

Si no fueran quien son...

En fin, que buena jornada, y a darle a las teclas. Y a las neuronas.

Un saludín

Dos almas cándidas y enamoradas :D:D

Yo soy un dios del photoshop, hermano :)) Y es en serio, facetas ocultas que tiene uno :))

¿También le pegas al photoshop? Tú eres un génio, macho.

jaja David me parto contigo!

¿pero cómo tachas de cabrón a tu otro yo, si el abusica aquí eres tú???

andale e intenta tomarte las cosas con más calma o el otro acabará contigo.

Yo y mis circunstancias (o mis circunstancias y yo, para no hacerlo tan egocéntrico); los escritores tendemos a dramatizarlo todo. Lo que a estas alturas tengo claro es que prefiero ir un pelín agobiado con trabajo que me gusta y que se puede desarrollar con entusiasmo, que llevar una vida anquilosada por estrés y problemas que escapan a tu control y a tu gusto.

    • Popular
    • Categories
    • Archives